Mi arte es una conexión que ocurre entre mis manos, la materialidad del papel, el bisturí, la tijera, agujas e hilos y mis soliloquios. Materializo en el papel algo que aún no fue pensado. El papel es un lenguaje. Es sentir su textura con los relieves en cada diseño.  Escuchar el sonido que genera con el movimiento según su gramaje. El juego de colores y efectos visuales que se genera con la diversidad en la paleta de colores. Su aroma según las tintas que se utilizan para teñirlos. En el papel encuentro una forma de sublimar el dolor, duelos de la infancia, la tristeza, los miedos, todos esos recorridos del alma que pudieron haberme dejado paralizada salen constantemente transformados en obras con movimiento, luz y color.